Mi parte misteriosa
Mi padre volvía a casa por la noche.
Yo le decía: ¿Papá, sos vos?
Él estaba cansado, había viajado mucho.
Tenía la cabeza blanca como la de un fantasma.
Su cuerpo flotaba a unos centímetros del suelo,
y sus pies no se oían porque no caminaba,
pero sí se sentía cómo su ropa iba rozando los muebles.
Buscaba en el fondo de la casa unos cuadernos
con su letra manuscrita.
Unos cuadernos que yo había cubierto con dibujos.
Revolvía cajas llenas de cosas viejas.
Yo le gritaba: Papá, por favor, dejanos dormir.
En la cama unos junto a otros estábamos sus hijos.
Éramos tres o cuatro esqueletos blancos y brillantes, de niños.
Afuera hacía frío y el viento aullaba
una canción muy triste.
Francisco Garamona.
Propuesta de escritura para hoy:
─Escribí un texto que empiece por ese último verso.
Sumate a esta #ventanaalaescritura mandá tu texto a info@siempredeviaje.com.ar para que lo publiquemos en nuestro blog
#ventanaalaescritura
¡Compartamos leer y escribir!
Arte: #raycaesar