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| Jantzen |
El sueño despliega el paisaje. Hace surgir bajo los pasos las ciudades invertidas, líneas oblicuas en un camino reglado, ventanas fugitivas, follajes de árboles recorridos por animales desconocidos. Este paisaje es el nuestro y sin embargo lo tenemos por absolutamente no familiar. Hay sueños dolorosos, parecidos a desgarros de amor cuando el ser amado se aleja y lo presenciamos, impotente, en su deserción. El paisaje se vacía progresivamente de toda gravidez y la luz parece venir de adentro de las cosas mismas, hablando de manera atenuada por el agua. Y hacer valer esa presencia paradojal del mundo que nos concede el sueño, no es cerrarse únicamente sobre el aquí y ahora (que son los adverbios del fantasma), sobre lo cotidiano, sino ser desbordado, desplazado por cualquier cosa que nos precede y nos desarma. ¿Tal vez sea nuestra relación con ese lugar, llamado espiritual, lo que desplaza, del interior, toda certeza?
Anne Dufourmantelle, Inteligencia del sueño.
(en proceso de traducción por Nocturna Editora, Fernanda Restivo y Karina Macció)
Propuesta de escritura para hoy:
-¿Qué paisaje se despliega en tus sueños? -"El paisaje se vacía progresivamente de toda gravidez y la luz parece venir de adentro de las cosas": te animás a hacer esto en un texto?
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#ventanaalaescritura
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