domingo, 16 de agosto de 2020

Elena se asoma a Ventana a la escritura

 



En lo vasto,
a cielo abierto
no siempre cantan los pájaros ;
no siempre el viento
agita  su vuelo.


A veces es necesario 
ser vallados, 
sentir un borde que nos abrace,
que nos contenga,
donde la vida se anime
a volver a parirse;
donde la vida no tema volver  a partirse.


Alambrados mis bordes;
y angostado el territorio
del moverse,
en ésta apretura del destino,
percibo que,
no todo es estrechez,
también en el adentro
sobrevuelan cielos.


Cada noche,
a rienda suelta, 
un estreno.
Un escenario de sueños,
de ensayos pasados 
y libretos nuevos,
reaniman escenas
dónde mi vida entra en juego.
Como pájaros revolotean;
se avisparon, están despiertos.


Entonces, me doy cuenta,
que a veces,
lo abierto es adentro.


Cómo si supieran
que hay un techo que los contiene...
Cómo si supieran
que hoy es posible que los registre,
que repare en ellos, 
e intente  develar su misterio.


En lo amplio,
en lo extenso,
a veces me pierdo,
no escucho mis voces,
no escucho mi cuerpo. 
En el afuera,
un abanico de fugas,
variedad de atajos,
y huidas posibles.


Habitar mi espacio,
hacerme morada,
es don,ofrenda,mirada.
Sentir mi propio ritmo,
mis pulsaciones,
mis temores y mi aliento. 
Conectar con mi intuición,
dejar volar la imaginación, 
y recrear así,
todos mis posibles;
no ya como atajos
sino como vertientes.
Sentirme viva,
estar conmigo.


Delimitar
mi frontera de contacto,
lo propio y lo otro.
Soltar la cuerda, a veces,
y también,
saber enrollarme,
para que arda la vida
en pequeños gestos,
y mis pliegues
se vuelvan  alas
donde viajen mis sueños.


Elena Agnese.


En respuesta a la consigna de #ventanaalaescritura
Vos también podés enviarnos tu texto.
#compartamosleeryescribir

@arteterapialavertiente




No hay comentarios: