Cuando yo era muy chiquita pregunté a mamá: -¿Eso qué es?
Y ella contestó: -Es una escoba.
Y yo dije: -¿Qué es escoba?
-Una mata atada a un palo, sujeta con hilos; y sirve para ordenar la casa.
Repliqué riendo:
-Antes de nacer, yo tenía una escoba… color de plata. La recuerdo, perfectamente. Con ella iba en un minuto a cualquier parte.
Mamá se quedó tal una mora; en puntas de pie. Y preguntó:
-Tú… ¿cómo eras… antes… de nacer?
Dije: -Era alta y muy bonita. Las otras muchachas no me querían, me odiaban; fingían burlarse, reír, pero, no me importó. Yo usaba vestido lila, mantón verde, sombrero picudo, e iba en un minuto a cualquier punto.
Mamá insistía como una boba, y fuera de sí.
-Tú… ¿cómo eras… antes de nacer?
Contesté:
-Me llamaba Turmalina. Tenía una larguísima cabellera color almendra. Y…
Pero, fue todo lo que le conté de mí.
Marosa di Giorgio, La falena.
