Grillo Grillo
Cuando estoy solo una noche de verano y
hay un grillo en la casa, siempre siento
que todo podría ser peor. Tal vez está lloviendo,
y truenos y relámpagos sacuden la
casa. Se corta la luz, y tengo que buscar a tientas
en la oscuridad una vela. Al fin
encuentro una, ¿pero dónde están los fósforos?
Siempre los guardo en ese cajón. Tumbo
un jarrón, pero no se rompe. Temiendo
romper algo, vuelvo a mi silla y me quedo
sentado en la oscuridad. Los rayos caen
por todas partes alrededor de la casa. Y entonces me acuerdo
del grillo y trato de escuchar su canto. Pronto pasa
la tormenta y vuelve la luz. Mi casa se llena
de un inquietante silencio verde. Me preocupa
que al grillo también lo haya fulminado
un rayo.
James Tate, Qué felices éramos.
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