Soplando brasas en tu corazón
Indio
La
voracidad fugaz de ese destello
me
quema-me quemo
Eso lo sé,
y hacer menos no puedo
Ardo con
un fulgor tal, que enciendo
(a
cualquiera enciendo)
Quedo
atrapada, perdida, incendiada.
Y no
puedo. No quiero.
Mi
tentación de arder es tan grande
que el
infierno se vuelve encantador
le temo a
toda esta pasión
a sus
paradojas , a mi desenfreno.
Hacer otra
cosa
quiero y
no puedo
Brasa
agitada con viento soy
En esto me
convierto
Así, me
quema el deseo
Repito.
Quiero. No Puedo
Gabriela Aristegui, 2014.
Texto producido en los talleres de Siempre de Viaje.
Issei Suda |
No hay comentarios:
Publicar un comentario